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Reducir el consumo de sal es un objetivo común para muchas personas que buscan mejorar su salud. El exceso de sal en la dieta se asocia con varios problemas de salud, como la hipertensión arterial y las enfermedades cardíacas. Afortunadamente, hay una manera deliciosa y creativa de lograrlo: ¡utilizando especias! En este post, exploraremos cómo puedes reducir la sal en tus comidas sin sacrificar el sabor, aprovechando el poder de las especias.

La sal es un mineral esencial para nuestro cuerpo, pero el exceso puede ser perjudicial. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir menos de 5 gramos de sal al día (aproximadamente una cucharadita). Sin embargo, muchos de nosotros consumimos mucho más que eso, a menudo sin darnos cuenta.

Reducir la sal puede:

Si estás buscando alternativas libres de gluten para tus recetas de repostería, panadería o cocina en general, has llegado al lugar indicado. En el terreno de las harinas sin gluten existen multitud de posibilidades para experimentar y crear recetas espectaculares que harán que no eches de menos el gluten o la proteína de trigo.

La harina de arroz es una de las harinas sin gluten más versátiles y ampliamente disponibles en el mercado. Se produce moliendo arroz blanco o arroz integral. Se puede utilizar como sustituto de la harina de trigo en casi cualquier receta y es perfecta para hacer pan, pasteles, galletas y masa para empanadas.

La harina de quinoa se produce moliendo quinoa cruda en polvo fino. Es una excelente fuente de proteínas, fibra y varios nutrientes esenciales. Es perfecta para hacer pan, tortitas y galletas. Para mejorar su textura y sabor se suele utilizar combinada con otras harinas sin gluten. También puede utilizarse para espesar sopas, cremas o salsas e incluso para elaborar pasta casera.